Por Manuel Ruiz

Municipalidad de Deán Funes venció por tres sets a cero a Municipalidad de Tunuyán (25 – 14, 25 – 21, 25 – 22) y abrocho su pasaje a semifinales donde enfrentará a Ciudad de Buenos Aires. El de Córdoba sabía antes de jugar que había logrado el objetivo, y confimó dentro de la cancha lo logrado. Juarez pudo rotar el equipo y el banco respondió.

El juego arranco inestable. Raro. Todo se había decidido entre sábado y antes de las 21.00 hs. Y se notó. El error se hizo presente de los dos lados de la red en todos los aspectos del juego. A ambos le costaba todo, el juego no alcanzaba la fluidez necesaria. El local mostraba apenas mejores signos desde el servicio y desde el bloqueo, pero no lo suficientes para alejarse de su rival. Fue luego del primer técnico que Ocampo metió desde la batuta una seguidilla de servicios lo suficientemente dañinos como para establecer una distancia de seis unidades que sería imposible de alcanzar para Tunuyán. Y encima, el local empezó a levantar las manos. Desde el bloqueo mantuvo la diferencia. Y el rival sucumbió ante la ineficacia, la falta de ideas y una recepción muy floja que ensuciaba toda gestación ofensiva. 25 – 14, con mucha distancia, lo cerró Deán Funes.

La rotación propuesta por Miguel Juarez mostró en un muy buen nivel a Gabriel Romero, el juvenil riojano, que aprovechó positivamente sus minutos, inclusive inscribiendóse entre los anotadores del parcial.

Con lagunas empezó el segundo segmento el local, que sufrió con la intensidad defensiva de los mendocinos que tuvieron un pasaje de 5 a 2, pero no supieron defender esa ventaja, y fueron ellos los que entraron en la laguna del no forzado, y vieron como los deanfunenses llegaron antes al primer tiempo técnico. Andrés Ribone tuvo un gran momento desde ahí convirtiéndose en la solucíón más efectiva del ataque de un equipo que mostraba una gran solidaridad y laburador en defensa. Fue el mismo Ribone el que sufrió el servicio de Tunuyán. La muñequera azul que contenía el dolor y la lesión del villamariense, llamaba la atención de los sacadores visitantes, y complicaban el pase local. Y el juego se puso 22 – 21. Ahí cuando Tunuyán debía confirmar la remontada, apareció la corrección en la recepción local, lo que permitió que Borgiani pueda alimentar propiciamente a Figueroa por el carril central y Ocampo por dos. Fue el mismo Ocampo el que metió el gorro que sellaría el set 25 – 21.

El tercer parcial sirvió para confirmar no sólo el resultado sino que también para confirmar la regularidad de Matías Montalbán. Gran trabajo del libero de Cruz del Eje que volvió a darle mucha seguridad a su equipo. Volvió a ser momento para la rotación intensa en el local, que tuvo a Fabrizzio Quintana a la altura de los requerimientos. Lo llevo y lo cerró con solvencia el local, que ante la falta de exigencia de los mendocinos, oficializó su pasaje a las semifinales.

Fin de semana redondo para Municipalidad de Deán Funes que ganó el cuadrangular de la Zona 2 invicto y sin ceder sets. Cambió de estadio (otro piso, otra altura de techo) y no lo sintió. Pero sobretodo supo jugar y responder ante la presión de todo eso. De ser candidato y de ser el local. Se metió el otro equipo cordobés en las semis. En una semana vuelve a jugar frente al candidato de todos, pero para eso falta mucho. Pero en el norte cordobés es tiempo de festejar. Se cumplido el objetivo.

AsÍ lo vivieron, Jorge Vaca Álvarez y Rodrigo Ocampo

Síntesis

Estadio: Salón Iribarnen

Árbitros: Benedetti - Manzanel

Parciales: 25 – 14, 25 – 21, 25 – 22

Municipalidad de Deán Funes: Ribone, Borgiani, Vaca Alvarez, Carrizo Molina, Figueroa, Montalbán J., Montalbán M. (L)(FI) Romero, Molina, Petrello, Quintana.

D.T.: Miguel Juarez; A.T.: Diego Pajón

Municipalidad de Tunuyán: Zarate, Vega, Rojas, Andraos, Zanotti, Markinovich, Castillo (L), Serrani, Vazquez, Chavero, Clocean, Montiel.

D.T.: Matias Britos; A.T.: Carlos Amieva